Diferencia entre revisiones de «Bibliografia Jose Marti»

De CEBES Perquín
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Alhambra'''</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Dolor'''</div>
<div class="NavContent" style="display: none;">Grata la voz del agua a quien abrumaron negras arenas, grato a la mano cóncava el mármol circular de la columna, gratos los finos laberintos del agua entre los limoneros, grata la música del zéjel, grato el amor y grata la plegaria dirigida a un Dios que está solo, grato el jazmín. Vano el alfanje ante las largas lanzas de los muchos, vano ser el mejor. Grato sentir o presentir, rey doliente, que tus dulzuras son adioses, que te será negada la llave, que la cruz del infiel borrará la luna, que la tarde que miras es la última.</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">¡Dolor! ¡Dolor! eterna vida mía, Ser de mi ser, sin cuyo aliento muero! Goce en buen hora espíritu mezquino Al son del baile animador, y prenda Su alma en las flores que el flotante lino De mujeres bellísimas engasta:? Goce en buen hora, y su cerebro encienda En la rojiza lumbre de la incasta Hoguera del deseo:? Yo, ?embriagado de mis penas,? me devoro, Y mis miserias lloro, Y buitre de mí mismo me levanto, Y me hiero y me curo con mi canto, Buitre a la vez que altivo Prometeo.</div>
 
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Alguíen'''</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Arbol de mi alma'''</div>
<div class="NavContent" style="display: none;">Un hombre trabajado por el tiempo, un hombre que ni siquiera espera la muerte (las pruebas de la muerte son estadísticas y nadie hay que no corra el albur de ser el primer inmortal), un hombre que ha aprendido a agradecer las modestas limosnas de los días: el sueño, la rutina, el sabor del agua, una no sospechada etimología, un verso latino o sajón, la memoria de una mujer que lo ha abandonado hace ya tantos años que hoy puede recordarla sin amargura, un hombre que no ignora que el presente ya es el porvenir y el olvido, un hombre que ha sido desleal y con el que fueron desleales, puede sentir de pronto, al cruzar la calle, una misteriosa felicidad que no viene del lado de la esperanza sino de una antigua inocencia, de su propia raíz o de un dios disperso. Sabe que no debe mirarla de cerca, porque hay razones más terribles que tigres que le demostrarán su obligación de ser un desdichado, pero humildemente recibe esa felicidad, esa ráfaga. Quizá en la muerte para siempre seremos, cuando el polvo sea polvo, esa indescifrable raíz, de la cual para siempre crecerá, ecuánime o atroz, nuestro solitario cielo infierno.</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">Como un ave que cruza el aire claro Siento hacia mí venir tu pensamiento Y acá en mi corazón hacer su nido. Ábrese el alma en flor: tiemblan sus ramas Como los labios frescos de un mancebo En su primer abrazo a una hermosura: Cuchichean las hojas: tal parecen Lenguaraces obreras y envidiosas, A la doncella de la casa rica En preparar el tálamo ocupadas: Ancho es mi corazón, y es todo tuyo: Todo lo triste cabe en él, y todo Cuanto en el mundo llora, y sufre, y muere! De hojas secas, y polvo, y derruidas Ramas lo limpio: bruño con cuidado Cada hoja, y los tallos: de las flores Los gusanos del pétalo comido Separo: oreo el césped en contorno Y a recibirte, oh pájaro sin mancha Apresto el corazón enajenado!</div>
 
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;>'''Antelación del amor'''</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Con la Primavera'''</div>
<div class="NavContent" style="display: none;">Ni la intimidad de tu frente clara como una fiesta ni la privanza de tu cuerpo, aún misterioso y tácito y de niña,  
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<div class="NavContent" style="display: none;">Con la primavera Viene la canción, La tristeza dulce Y el galante amor. Con la primavera Viene una ansiedad De pájaro preso Que quiere volar. No hay cetro más noble Que el de padecer: Sólo un rey existe: El muerto es el rey.</div>
ni la sucesión de tu vida situándose en palabras o acallamiento serán favor tan persuasivo de ideas como el mirar tu sueño implicado en la vigilia de mis ávidos brazos. Virgen milagrosamente otra vez por la virtud absolutoria del sueño, quieta y resplandeciente como una dicha en la selección del recuerdo, me darás esa orilla de tu vida que tú misma no tienes, Arrojado a la quietud divisaré esa playa última de tu ser y te veré por vez primera quizás como Dios ha de verte, desbaratada la ficción del Tiempo sin el amor, sin mí.</div>
 
 
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;>'''Arte Poético'''</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Cese señora el duelo'''</div>
<div class="NavContent" style="display: none;">Mirar el río hecho de tiempo y agua y recordar que el tiempo es otro río, saber que nos perdemos como el río y que los rostros pasan como el agua. Sentir que la vigilia es otro sueño que sueña no soñar y que la muerte que teme nuestra carne es esa muerte de cada noche, que se llama sueño. Ver en el día o en el año un símbolo de los días del hombre y de sus años, convertir el ultraje de los años en una música, un rumor y un símbolo, ver en la muerte el sueño, en el ocaso un triste oro, tal es la poesía que es inmortal y pobre. La poesía vuelve como la aurora y el ocaso. A veces en las tardes una cara nos mira desde el fondo de un espejo; el arte debe ser como ese espejo que nos revela nuestra propia cara. Cuentan que Ulises, harto de prodigios, lloró de amor al divisar su Itaca verde y humilde. El arte es esa Itaca de verde eternidad, no de prodigios. También es como el río interminable que pasa y queda y es cristal de un mismo Heráclito inconstante, que es el mismo y es otro, como el río interminable.</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">Cese, señora, el duelo en vuestro canto, ¿Qué fuera nuestra vida sin enojos? ¡Vivir es padecer! ¡sufrir es santo!
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¿Cómo fueran tan bellos vuestros ojos Si alguna vez no los mojara el llanto? Romped las cuerdas del amargo duelo. Quien sufre como vos sufrís, señora: Es más que una mujer, algo del cielo, Que de él huyó y entre nosotros mora.</div>
 
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Copa con alas'''</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">Una copa con alas: quién la ha visto antes que yo? Yo ayer la vi. Subía con lenta majestad, como quien vierte óleo sagrado: y a sus bordes dulces mis regalados labios apretaba:? Ni una gota siquiera, ni una gota del bálsamo perdí que hubo en tu beso! Tu cabeza de negra cabellera?Te acuerdas?? con mi mano requería, porque de mí tus labios generosos no se apartaran. ?Blanda como el beso que a ti me transfundía, era la suave atmósfera en redor: La vida entera sentí que a mí abrazándote, abrazaba! Perdí el mundo de vista, y sus ruidos y su envidiosa y bárbara batalla! Una copa en los aires ascendía y yo, en brazos no vistos reclinado tras ella, asido de sus dulces bordes: Por el espacio azul me remontaba! Oh amor, oh inmenso, oh acabado artista: en rueda o riel funde el herrero el hierro: una flor o mujer o águila o ángel en oro o plata el joyador cincela: Tú sólo, sólo tú, sabes el modo de reducir el Universo a un beso!</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''Cuando me puse a pensar'''</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">Cuando me puse a pensar La razón me dio a elegir Entre ser quien soy, o ir El ser ajeno a emprestar, Mas me dije: si el copiar Fuera ley, no nacería Hombre alguno, pues haría Lo que antes de él se ha hecho: Y dije, llamando al pecho, ¡Sé quien eres, alma mía!?</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''A los espacíos'''</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">A los espacios entregarme quiero Donde se vive en paz, y con un manto De luz, en gozo embriagador henchido, Sobre las nubes blancas se pasea,? Y donde Dante y las estrellas viven. Yo sé, yo sé, porque lo tengo visto En ciertas horas puras, cómo rompe Su cáliz una flor,? y no es diverso Del modo, no, con que lo quiebra el alma. Escuchad, y os diré: ?viene de pronto Como una aurora inesperada, y como A la primera luz de primavera
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De flor se cubren las amables lilas... Triste de mí: contároslo quería Y en espera del verso, las grandiosas Imágenes en fila ante mis ojos Como águilas alegres vi sentadas. Pero las voces de los hombres echan De junto a mí las nobles aves de oro: Ya se van, ya se van: ved cómo rueda La sangre de mi herida. Si me pedís un símbolo del mundo En estos tiempos, vedlo: un ala rota. Se labra mucho el oro, el alma apenas!? Ved cómo sufro: vive el alma mía Cual cierva en una cueva acorralada:? ¡Oh, no está bien: me vengaré, llorando!</div>
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<div class="NavHead" style="background-color: #2471A3;">'''A Emma'''</div>
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<div class="NavContent" style="display: none;">No sientas que te falte el don de hablar que te arrebata el cielo, no necesita tu belleza esmalte ni tu alma pura más extenso vuelo. No mires, niña mía, en tu mutismo fuente de dolores, ni llores las palabras que te digan ni las palabras que te faltan llores. Si brillan en tu faz tan dulces ojos que el alma enamorada se va en ellos, no los nublen jamás tristes enojos, que todas las mujeres de mis labios, no son una mirada de tus ojos.</div>
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Revisión del 02:09 11 abr 2021