Abrir menú principal

¿Quién ha tocado mi manto

Revisión del 03:06 29 abr 2023 de David (discusión | contribuciones)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)

Fecha:  01-07- 2018.

Ciclo Litúrgico:  Domingo 13º del Tiempo Ordinario - Ciclo B.

Temas: Esperanza, Superación, Aceptación, Lucha, Milagros.

Evangelio según san Marcos (5, 21-43).

En aquel tiempo cuando Jesús regreso en la barca al otro lado del lago se quedó a la orilla y ahí se le reunió mucha gente, entonces se acercó uno de los jefes de la sinagoga llamado Jairo al ver a Jesús se echó a sus pies y le suplicaba con insistencia mi hija está agonizando ven a imponerle las manos para que se cure y viva Jesús se fue con él y mucha gente lo seguía y lo apretujaba, entre la gente había una mujer que padecía flujo de sangre desde hacía doce años había sufrido mucho a manos de los médicos y había gastado en eso toda su fortuna pero en vez de mejorar había empeorado, holló hablar de Jesús vino y se le acerco por detrás entre la gente y le toco el manto pensando que con solo tocarle el vestido se curaría, e inmediatamente se le seco la fuente de su hemorrágica y sintió en su cuerpo que estaba curada, Jesús noto al instante que una fuerza curativa había salido de él, y se volvió hacia la gente y les pregunto ¿Quién ha tocado mi manto? Sus discípulos le contestaron estás viendo como le empuja la gente y todavía preguntas quien me ha tocado, pero él seguía mirando alrededor para descubrir quien había sido, entonces se acercó la mujer se acercó asustada y temblorosa al comprender lo que había pasado se postro a sus pies y le confeso la verdad Jesús la tranquilizo diciendo hija tu fe te ha curado vete en paz y quedas sana de tu enfermedad, todavía estaba hablando Jesús cuando unos criados llegaron de casa de  jefes de la sinagogas para decirle a este ya se murió tu hija para que sigues molestando al maestro, Jesús alcanzo a oír lo que hablaba y le dijo al jefe de la sinagoga no temas, basta con que tengas fe, no permitió que lo acompañara más que Pedro, Santiago y Juan el hermano de Santiago al llegar a la casa del jefe de las sinagoga vio Jesús el alboroto de la gente y holló los llantos y alaridos que daban entro y les dijo que significa tanto llanto y alboroto  la niña no está muerta si no está dormida y se reían de él, entonces Jesús echo fuera a la gente y con los padres de la niña y sus acompañantes entro a donde estaba la niña la tomo de la mano y le dijo talita cum que significa oye mi niña levántate, la niña que tenía doce años se levantó inmediatamente y se puso a caminar todos se quedaron asombrados, Jesús les ordeno severamente que no lo dijeran a nadie y les mando que le dieran de comer a la niña.

Resumen:

Queridos hermanos y hermanas: nuestra reflexión se concluyó afirmando: toda muerte es vencible.

Esto debe animarnos a enfrentar cualquier dificultad, cualquier obstáculo y vivir con ganas, esta vida que Dios nos ha dado.

Homilía

Para introducir nuestra reflexión de hoy, es importante recoger el mensaje alentador  de la primera lectura. Dice que, en el plan original de Dios, no existe la muerte, y lo va resaltando con algunas frases contundentes.

  • Todo lo creó para que subsistiera;
  • Las criaturas son saludables, no hay en ellas veneno mortal;
  • Dios creó al hombre y a la mujer, para que nunca murieran, porque los hizo a imagen y semejanza de sí mismo.
  • En pocas frases, la lectura ha querido formularnos, lo que es esencial en nuestra fe cristiana: la muerte no es punto final, no es desgracia, sino acceso a la vida, la vida abundante que Dios, al final, nos ofrecerá.

En el evangelio, Marcos nos narra dos milagros. Uno es la curación, de aquella mujer cananea; el otro, la resurrección de la hija de Jairo, jefe de las sinagogas.

El sufrimiento es de todos los tiempos. También en el tiempo de Jesús había mucho sufrimiento, igual como hoy en día.

Esta mujer sufre de pérdida de sangre, desde hace doce años, ya un largo tiempo. En este caso, las leyes judías la califican, por ese flujo de sangre, como impura. Lo cual  quiere decir, que ella era una mujer imposibilitada para ocupar un lugar digno dentro de la sociedad, y, lo que aún es más grave, imposibilitada para establecer una relación cercana con Dios.

Cuanto sufrimiento debe haber en una persona que durante doce años tiene que aguantar el desprecio y la discriminación de medio mundo, por ser considerada  impura. Es evidente que hizo todo lo posible ,por salir de esta situación y gastó, así dice la lectura, su fortuna  en los médicos, pero sin poder curarse; en lugar de mejorar fue empeorando.

Esta mujer, movida por su fe, va haciéndose camino en medio de una multitud de gente. Su objetivo es tocar el manto de Jesús y piensa que, tal vez. así pueda curarse. Y de hecho,  esto es lo que sucedió: sintió su cuerpo curado, después de haber tocado el manto y Jesús también notó que una fuerza curativa salió de él. A partir de este momento ,esta mujer, de verdad, resucita porque ahora sí puede ocupar un lugar digno dentro de la sociedad y establecer con Dios una relación cercana. La vida de esta mujer ha cambiado por completo.

En cuanto a la emancipación de la mujer hemos avanzado bastante. Pero hay todavía mucho sufrimiento oculto. José Antonio Pagola lo dice así: “en nuestra sociedad se está despertando poco a poco la sensibilidad colectiva ante la violencia y las agresiones que la mujer padece. Crecen las denuncias, se agiliza el código penal, se abren centros para mujeres maltratadas, pero somos todavía pocos conscientes del sufrimiento oculto y la tragedia de tantas mujeres frustradas en su ser más íntimo de mujer” Y va señalando una serie de grupos de mujeres sufridas: ”mujeres perdidas en el anonimato de los hogares y las faenas caseras ,cuya dedicación y entrega es poco valorada; mujeres inseguras de sí mismas, atemorizadas por su propio esposo a veces, que viven culpabilizándose de su desaciertos y depresiones porque no encuentran el apoyo y la compresión que necesitan; mujeres vencidas por la soledad, cansadas ya de luchar y sufren en silencio; que no aman y no son amadas; mujeres desgastadas, apagadas por la dureza de la vida; que descuidan su cuerpo y su femineidad porque hace mucho tiempo que nadie las mira con ternura y con amor; mujeres que recuperarían su ser autentico de mujer, si se encontraran con la mirada acogedora y curadora de un esposo o de un verdadero amigo.”

Todo esto sigue siendo verdad, sobre todo, en nuestra sociedad salvadoreña, donde la mujer todavía recibe un trato indigno en muchas oportunidades.

Últimamente se habla bastante de feminicidios, de asesinatos crueles de mujeres. Es una realidad. Debe haber un deseo tanto en el hombre como en la mujer, de mejorar esta situación, a fin de que ,hombres y mujeres puedan establecer una relación cercana y respetuosa y así juntos y juntas construir un mundo más humano, un mundo mejor.

En la segunda parte del evangelio, Jesús resucita a la niña de Jairo ,el jefe de las sinagogas. Jesús va haciéndose camino en medio de tanta gente, y hasta se burlan de él, pero logra su propósito: resucita a la niña de Jairo.

En este caso Jesús se enfrenta a la muerte que se presenta “al final de la vida”. En el caso anterior, de la mujer cananea, cura a una mujer ”muerta en vida”. Ella vivía biológicamente  pero no tenía la oportunidad de realizarse plenamente como mujer.

Existe la muerte al final de la vida, existe la muerte en vida; Jesús enfrenta ambas muertes. En ese sentido podemos ir concluyendo tres cosas:

En primer lugar, refiriéndose a la mujer cananea: una ley que no permite la realización de la persona es una ley que no viene de Dios. Hay que ver si las diferentes normas religiosas, nos ayudan a realizarnos plenamente o no nos ayudan. Si no nos ayudan, es porque no vienen de Dios. Las leyes tienen como propósito o deben tener como propósito, la realización de toda la persona humana.

En segundo lugar: en ambos casos hay fe de por medio. El milagro se va haciendo como respuesta a la fe de la mujer cananea y a la fe del papá Jairo. Sí, pero no se trata de tener fe en una serie de verdades .Más bien se trata de una fe que podemos entender como un acto de confianza. Confianza en Dios, Padre, que, en ningún momento, no nos va a defraudar. y por último, como ya dijimos, en el evangelio Jesús enfrenta y vence tanto la muerte que se presenta en  la vida, como la muerte que se presenta al final de la vida

En resumen toda muerte es vencible!. Es un mensaje muy alentador. Es un mensaje que nos permite vivir, con aquella expectativa que va más allá de la muerte. No nos encaminamos hacia la muerte sino hacia la vida. Esto nos debe motivar paras vivir con entusiasmo, con empeño y con dedicación, pues… nuestra vida va por buen camino.

Padre Rogelio Ponseele

Referencias