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Reyes Magos

Revisión del 16:58 10 nov 2020 de David (discusión | contribuciones) (Corrección de espacios entre palabras)
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Tema: Epifanía de Jesús.


Resumen:

Queridos hermanos y hermanas: estamos concluyendo nuestra celebración, en este día, en que se celebra la epifanía del Señor, es decir, la manifestación del señor a la humanidad entera. El mensaje, de fondo, es que Dios no excluye a nadie. Dios en su inmenso amor incluye a todos y a todas, Este es el mensaje central de lo que acabamos de celebrar.

Con esta celebración, hemos querido iniciar el año 2018 pidiéndole a Dios abundantes bendiciones para nosotros, nuestras familias, y nuestra comunidad, a fin de que el año 2018 pueda ser un año de mucha felicidad, para nosotros y para todas las personas que nos rodean.

Homilía

Queridos hermanos y hermanas: Mateo incluye en su  evangelio esta bella historia sobre los reyes magos. La biblia no dice que son tres, tampoco que son reyes, o que son de color diferente, la biblia no dice nada de esto, esto es fruto de la imaginación de la tradición cristiana.

Estos magos observan, día a día, lo que está pasando en el cielo. De repente descubren a una estrella, en el área donde estaban observando. Y según sus creencias, esa estrella anuncia que ha nacido un niño, rey de los judíos. No se quedaron de brazos cruzados, se ponen en camino, porque quieren saber, si es cierto lo que han observado y lo que indican sus creencias. Se ponen a caminar.

Cuando llegan  a Jerusalén, creyendo que toda esta gente que habita la ciudad capital debe  saber más de este niño, los magos comienzan a preguntar en voz alta: “¿Donde está el rey de los Judíos que acaba de nacer?, porque vimos surgir su estrella y hemos venido a adorarlo.” Que unos magos, venidos de Oriente están averiguando sobre el nacimiento de un niño que será el rey de los judíos le llega pronto a los oídos de Herodes. Este se preocupa, pues, el es y será siempre el único rey de Palestina. De inmediato convoca a los sumos sacerdotes y a los que enseñaban la ley al pueblo, y les mandó a averiguar donde el Mesías tenía que nacer. Basándose en unas palabras del profeta Miqueas, le dijeron: ”En Belén de Judá, pues así lo escribió el profeta: Y tú Belén, tierra de Judá, no eres en absoluto, la más pequeña entre los pueblos, de Judá, porque de ti saldrá un jefe, que será el pastor de mi Pueblo de Israel”. De inmediato Herodes traslada esta información a los magos, y ellos retoman el camino. En este momento les aparece de nuevo la estrella que, al rato, se detiene encima de la casa donde, estaba el niño.

Entraron a esta casa. Vieron al niño y vieron a María y se postraron. Abrieron sus cofres y sacaron  sus regalos. Después, dice la historia, que volvieron a sus lugares por otro camino, advertidos de las malas intenciones de Herodes.

Algunas pequeñas reflexiones.

1. Hoy celebramos la Epifanía de Jesús.

La palabra epifanía quiere decir, manifestación. Jesús se manifiesta, se da a conocer a los tres magos de oriente. Anteriormente se había manifestado a los pastores que estaban cuidando sus rebaños en los alrededores de Belén.

Los magos no son parte del pueblo de Dios, no obstante también a ellos se manifiesta. El nacimiento de Jesús, este es el mensaje, tiene un carácter universal. Nace para salvar a la humanidad entera, Su misión no está limitado a un grupo social, o un pueblo específico, o una determinada raza etc. Su amor abarca toda la humanidad. Cuestiona la mentalidad sectaria del pueblo judío.

2. Salta a la vista la actitud de búsqueda de los magos. Han visto la estrella. Quieren saber si es cierto lo que les indica la estrella y sus creencias. No se quedan de brazos cruzados, se ponen en camino.

Nosotros, en general, no tenemos esa actitud de búsqueda. Respecto a nuestra fe y nuestra práctica cristiana muy poco estudiamos, poco averiguamos. Debemos, nosotros también, adquirir una actitud de búsqueda permanente para madurar en en nuestra fe y práctica.

3. El evangelio confronta dos mundos: el de los magos y el de Herodes, en el mundo de los magos hay búsqueda, apertura, buena voluntad, deseo de acoger.

En el mundo de Herodes no hay nada de esto, si hay orgullo, prepotencia, rechazo, malas intenciones. Siempre es bueno saber donde estamos ubicados, de lado de quienes estamos. Como cristianos ,debemos estar de lado de las víctimas y de la justicia. No lo podemos olvidar…

4. Herodes ve al niño como un rival. Hace una propuesta hipócrita a los magos: ”al volver ,después de haber encontrado al niño, pasen de nuevo por acá para darme todos los detalles, porque yo también quiero ir a adorarlo.”

Herodes está totalmente equivocado. El niño no es rival de nadie…Dios es nuestro mejor aliado en la búsqueda de la auténtica felicidad.

Estamos iniciando, pronto, un año nuevo: el año 2018.Por eso, estamos celebrando la misa, pidiéndole a Dios muchas bendiciones para el año 2018, para cada uno y cada una de nosotros.

Hay un escrito francés que dice: “El futuro tiene muchos nombres, para los débiles el futuro es inalcanzable, para los temerosos el futuro es lo desconocido y porque es desconocido nos da miedo, pero para los valientes ( y ojalá nos podemos ubicar entre los valientes), el futuro es una oportunidad”.

El papa también, habla de la felicidad. Quisiera citar dos frasecitas de él. dice: “Puedes tener defectos, estar ansioso y vivir irritado algunas veces, pero no te olvides que tú vida es la mayor empresa del mundo, solo tú puedes evitar que ella vaya en decadencia, hay muchos que te aprecian, admiran y te quieren”.

Hay otra frasecita donde dice: “Que en tus inviernos, seas amigo de la sabiduría, que cuando se equivoque en el camino sepa comenzar todo de nuevo, pues así será más apasionado por la vida y  descubrirá que ser feliz no es tener una vida perfecta, sino usar las lagrimas para regar la tolerancia, usar las pérdidas para refinar la paciencia, usar las fallas para esculpir la serenidad, usar el dolor para lapidar los contratiempos que siempre se presentan”.

El año 2018 tiene que ser un año de mucha felicidad, para cada uno y una de nosotros. Hagamos de nuestra parte todo lo que esté a nuestro alcance y pidámosle a Dios que no deje de bendecir abundantemente nuestros esfuerzos para conseguir la felicidad para nosotros y todos los que nos rodean. Luchemos confiando en Dios y confiando en todo lo que nosotros mismos somos capaces de hacer.