El Padre sin Cabeza.
Por lo que sabemos, hay dos versiones distintas de la leyenda del padre sin cabeza. En la primera se cuenta que un sacerdote se enamoró de una mujer y abandonó la Iglesia para casarse con ella.
Lo anterior visto desde la óptica de la Iglesia, significa que el pobre cura estaría condenado a pecado mortal por la eternidad. Es decir, dejar sus votos de castidad para contraer nupcias.
Mientras tanto, en la segunda leyenda que tiene que ver con el sacerdote descabezado, podemos decir que la gente mayor asegura que hace mucho tiempo hubo una fuerte revuelta en el Salvador y que uno de los padres de la Iglesia fue quien convenció al pueblo para que se levantara en armas en contra del gobierno colonial.
Hubo muchas batallas en las que el cura pudo salir airoso. Sin embargo, en una de las últimas escaramuzas, el ejército español logró apresar a los revoltosos y el padre fue condenado a la pena de muerte.
Además, en dicha narración se deja en claro que el alma del sacerdote, sale cada viernes del año de la Iglesia del Rosario, para hacer un recorrido por las principales calles de la ciudad.
Por otra parte, no sólo en la capital se le ha visto al padre sin cabeza, sino que también en poblaciones tales como Santa Ana o en Cojutepeque.