Diferencia entre revisiones de «Plantilla:Portada:Padre Rogelio Ponseele»

De CEBES Perquín
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<span class="main-header main-box-header" style=" font-size:100%; color:#045FB4; font-weight: bold;">'''Jesús, en el evangelio habla de una roca sobre la cual se construirá la iglesia, resistente ante toda agresión, y de Pedro como su líder. Hoy Jesús quiere continuar construyendo su iglesia, esta casa con fundamento sólido, pero donde no faltan las grietas, y que continuamente necesita ser reparada. Siempre. La iglesia siempre necesita ser reformada, reparada. Nosotros ciertamente no nos sentimos rocas, sino solo pequeñas piedras. Aún así, ninguna pequeña piedra es inútil, es más, en las manos de Jesús la piedra más pequeña se convierte en preciosa, porque Él la recoge, la mira con gran ternura, la trabaja con su Espíritu y la coloca en el lugar justo, que él desde siempre ha pensado y donde puede ser más útil a toda la construcción.''' [[Quién_dicen_los_hombres_que_es_el_Hijo_del_Hombre|<font class="hover-text">...Ver artículo completo</font>]]</div></div>
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<span class="main-header main-box-header" style=" font-size:100%; color:#045FB4; font-weight: bold;">'''El seguimiento a Jesús pueda que nos pida la renuncia a muchas cosas que valoramos en esta vida, pero la renuncia más difícil es la renuncia a nuestro propio yo. Nosotros y nosotras igualmente nos gusta ser valorados como importantes, como protagonistas de ciertas obras, como audaces a la hora de decir la verdad, etc. pero cuando escuchamos alguna amenaza, desaparecemos del escenario y quedamos mudos para siempre. El seguimiento a Jesús nos pueda exigir incluso, aunque no lo buscamos, la entrega de vida. En esto y en la respuesta que dieron está precisamente la grandeza de nuestros mártires.''' [[El_que_quiera_seguirme,_que_renuncie_a_sí_mismo|<font class="hover-text">...Ver artículo completo</font>]]</div></div>
 
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|width="100%" valign="middle"|<span class="main-header main-box-header" style="font-family:Ubuntu; font-size:150%;">'''[[Quién_dicen_los_hombres_que_es_el_Hijo_del_Hombre|Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre]]'''</span><div class="main-box-section" style="font-size:90%;">Jesús, en el evangelio habla de una roca sobre la cual se construirá la iglesia, resistente ante toda agresión, y de Pedro como su líder. Hoy Jesús quiere continuar construyendo su iglesia, esta casa con fundamento sólido, pero donde no faltan las grietas, y que continuamente necesita ser reparada. Siempre. La iglesia siempre necesita ser reformada, reparada. Nosotros ciertamente no nos sentimos rocas, sino solo pequeñas piedras. Aún así, ninguna pequeña piedra es inútil, es más, en las manos de Jesús la piedra más pequeña se convierte en preciosa, porque Él la recoge, la mira con gran ternura, la trabaja con su Espíritu y la coloca en el lugar justo, que él desde siempre ha pensado y donde puede ser más útil a toda la construcción.[[Quién_dicen_los_hombres_que_es_el_Hijo_del_Hombre|<font class="hover-text">...Ver artículo completo</font>]]</div>
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|width="100%" valign="middle"|<span class="main-header main-box-header" style="font-family:Ubuntu; font-size:150%;">'''[[El_que_quiera_seguirme,_que_renuncie_a_sí_mismo|El que quiera seguirme, que renuncie a s[i mismo]]'''</span><div class="main-box-section" style="font-size:90%;">El seguimiento a Jesús pueda que nos pida la renuncia a muchas cosas que valoramos en esta vida, pero la renuncia más difícil es la renuncia a nuestro propio yo. Nosotros y nosotras igualmente nos gusta ser valorados como importantes, como protagonistas de ciertas obras, como audaces a la hora de decir la verdad, etc. pero cuando escuchamos alguna amenaza, desaparecemos del escenario y quedamos mudos para siempre. El seguimiento a Jesús nos pueda exigir incluso, aunque no lo buscamos, la entrega de vida. En esto y en la respuesta que dieron está precisamente la grandeza de nuestros mártires.[[El_que_quiera_seguirme,_que_renuncie_a_sí_mismo|<font class="hover-text">...Ver artículo completo</font>]]</div>
 
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Revisión del 14:55 4 sep 2023

Padre Rogelio Ponseele
El que quiera seguirme, que renuncie a s[i mismo
El seguimiento a Jesús pueda que nos pida la renuncia a muchas cosas que valoramos en esta vida, pero la renuncia más difícil es la renuncia a nuestro propio yo. Nosotros y nosotras igualmente nos gusta ser valorados como importantes, como protagonistas de ciertas obras, como audaces a la hora de decir la verdad, etc. pero cuando escuchamos alguna amenaza, desaparecemos del escenario y quedamos mudos para siempre. El seguimiento a Jesús nos pueda exigir incluso, aunque no lo buscamos, la entrega de vida. En esto y en la respuesta que dieron está precisamente la grandeza de nuestros mártires....Ver artículo completo