Diferencia entre revisiones de «Y ustedes quién dicen que soy yo»

De CEBES Perquín
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Revisión del 23:07 20 may 2020

Fecha: 16-09-2018

Ciclo Litúrgico: Ciclo B - 24º del Tiempo Ordinario

Temas: Esperanza, Amor, Confianza.

Evangelio según san Marcos 8,27-35

En aquel tiempo Jesús y sus discípulos se dirigieron a los poblados de Cesarea de Filipo, por el camino les hizo esta pregunta; ¿Quién dice la gente que soy yo?, ellos le contestaron: algunos dicen que eres Juan El Bautista, otros que Elías y otros que alguno de los Profetas, entonces él les pregunto; ¿Y ustedes quién dicen que soy yo?, Pedro le respondió; tú eres El Mesías, y él les ordenó que no se lo dijera a nadie.

Luego se puso a explicarles que era necesario que el hijo del hombre padeciera mucho, que fuera rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, que fuera entregado a la muerte y que resucitará el tercer día. Todo esto lo dijo con entera claridad, entonces Pedro se lo llevó aparte y trataba de disuadirlo, Jesús se volvió, y mirando a sus discípulos reprendió a Pedro con estas palabras; apártate de mí Satanás, porque tú no juzgas según Dios sino según los hombres.

Resumen:

De la reflexión ,solo quisiera insistir un poco en lo ultimo, los diferentes aspectos que deben de estar incluidos, al menos estos ,en la imagen que nos vamos haciendo de Jesús.

1.  Su pasión por la verdad y por la justicia.

2.  Su insistencia en la practica del amor. El amor nunca debemos de sustituirlo por el odio, en nuestro corazón, no debe de caber el odio.

3.  Su compasión, se compadece de los pequeños, de los débiles, de los pobres y de los pecadores.

4.  Su coraje al enfrentar dificultades hasta la muerte.

5.  Su profunda y permanente confianza en Dios.

6.  Su triunfo sobre la muerte.

Incluyendo estos aspectos a la imagen o la figura de Jesús, vamos a tener que incluir estos aspectos en nuestra propia práctica, como seguidores de Jesús. Seamos cristianos de verdad.

Homilía:

Quien dices que soy yo.jpg

Esta misa nos da mucha alegría, porque hay mucha gente, muchos han decidido hoy participar en la Eucaristía, y también nos da mucha alegría porque estos niños y la señora Edith Tabora harán su primera comunión. Esto quiere decir que hay vida cristiana,y que nos estamos preocupando a fin de que estos niños y niñas vayan encontrando el buen camino. La primera comunión no es menos que una primera confirma.Los niños y las niñas confirman su deseo de seguir el camino de Jesús.

Ahora, de acuerdo con el evangelio, Jesús y sus discípulos van caminando hacia los poblados de Cesarea de Filipo, tal vez van a caminar unas cuantas horas. Jesús no pierde el tiempo, conversa con los discípulos o mejor dicho hace un sondeo. Les pregunta a los discípulos; ¿quién dice la gente que soy yo? A  los discípulos  no les parece difícil responder a esta pregunta, y le dicen a Jesús, a usted lo confunden con Juan Bautista, con Elías y con algún otro profeta.Lo cual quiere decir, que la gente ve a Jesús como un profeta, aquel que denuncia todo lo que no está del todo bien en la sociedad y en los sectores que conforman la sociedad y aquel que, a pesar de todo siempre alienta la esperanza. Para nosotros no es difícil entender esto, porque hemos tenido un profeta entre nosotros, monseñor Romero que denunciaba los atropellos al pueblo y que a la vez, en las circunstancias más difíciles, alentaba la esperanza.

Viendolo bien, el pueblo ha dado una respuesta buena, acertada. Jesús ha sido de verdad un profeta, nadie lo niega y el pueblo lo percibe. En aquellos años antes del conflicto había un sacerdote que decía; tenemos que escuchar al pueblo porque el pueblo es sabio. Una vez mas se comprueba eso en el evangelio. El pueblo, a la pregunta ¿Quién es Jesús?, ha dado una respuesta muy acertada.

Siguen caminando y Jesús hace ahora la misma pregunta directamente dirigida a los discípulos ¿y ustedes quién dicen que soy yo? Creo que debe haber habido un rato de silencio, porque siempre es más fácil hablar de otro, que hablar de uno mismo. Ante la primera pregunta no había dificultades para contestar, ante la segunda pregunta y ustedes quién dicen que soy yo, hay un silencio y de nuevo como acostumbrado, Pedro rompe el silencio y responde en nombre de todo el grupo de los discípulos y dice tú eres El Mesías.

Mesías es una palabra grande para el pueblo de Dios. Cuando el pueblo de Dios atravesaba muchas circunstancias difíciles siempre proyectaban la esperanza en la llegada del mesías, el enviado de Dios que tenía que venir para componer este mundo, para restablecer la justicia y la paz, así que Pedro también. en nombre de todos, dió una respuesta bastante buena, bastante acertada .

Jesús está contento y porque está contento piensa que ahora es el momento oportuno para hablar de algo un tanto desagradable, que él va a tener que sufrir y que él va a tener que morir en la cruz y al tercer día va a resucitar, es decir, insiste  en que el camino no va a ser tan fácil pero siempre tendrá un desenlace feliz.

Lo del sufrimiento, no estaba dentro de las expectativas de Pedro. Pedro estaba molesto con lo que Jesús estaba diciendo y se le acerca a Jesús tratando de disuadirlo, es decir, de convencerle de que las cosas no van a suceder como Jesús lo está diciendo. Jesús ,a su vez, se molesta con Pedro, lo reprende y le dice incluso, Satanás, quiere decir aquel que pretende apartar a Jesús del camino que el padre le ha indicado.

Nosotros sabemos que todo sucedió, tal como Jesús lo estaba diciendo y que Jesús murió en la cruz, sabemos esto y por consiguiente sabemos que toda vida cristiana, auténticamente cristiana, incluye sufrimiento. Esto es inevitable, lo que sucedió a Jesús sucederá también a sus seguidores.

Ahora falta una tercera pregunta. ¿Quién es Jesús para nosotros que nos llamamos cristianos, que nos llamamos seguidores de Jesús?, yo creo que no podemos hacer una imagen de Jesús sin incluir los siguientes aspectos:


1- Su Pasión por la verdad. la mera verdad y por la justicia. Jesús amaba la verdad. No una verdad ideologizada o politizada o fanatizada, si no la verdad que corresponde a la realidad que vivimos.Y también su pasión por la justicia. La justicia fue el proyecto de Jesús, lo que pretendía era contribuir, a que se vaya instaurando entre nosotros un mundo con justicia, un mundo justo, yo diría como se dice actualmente, cero tolerancia ante las injusticias. Luchó y trabajó y predicó, siempre queriendo contribuir a la instauración de un mundo justo.

2- Debemos incluir en nuestra imagen de Jesús su insistencia en el amor, que no se puede sustituir nunca por el odio. Nosotros estamos invitados a amar, pese a tantas cosas que suceden en torno a nosotros y en contra de nosotros. Debemos saber amar, nunca abrir nuestro corazón al odio, no queremos odiar a nadie, queremos practicar siempre el amor.

3- Hay que destacar también en la figura de Jesús su compasión por los pobres, los pequeños, los débiles y los pecadores. La compasión es una virtud esencial en la vida de Jesús, se compadece ,es decir, siente lo que el otro siente. Nosotros también tenemos que ser personas que se compadecen de todos aquellos y aquellas que sufren.

4- Su coraje al enfrentar las dificultades que se presentaban en la vida, incluso su coraje ante la muerte. Coraje en la vida es indispensable. la vida de muchos y de muchas no es fácil, se necesita coraje para enfrentar tantas dificultades y tantas situaciones adversas que puedan presentarse.

5- Su profunda y permanente confianza en Dios, confiaba en Dios, su padre. En las circunstancias más críticas Jesús manifiesta su confianza en Dios; confiar en Dios, acudir a Dios, aferrarnos a Dios cuando nos toca atravesar una situación muy difícil.

6- Y por último no debe faltar en la figura de Jesús que nos vamos haciendo,  su triunfo sobre la muerte. Toda muerte es vencible En ese sentido, los seguidores de Jesús tenemos que mantener siempre la esperanza.

Estaba hace unos días en un congreso teológico y había alguien que decía, si perdemos la esperanza perdemos todo. Se estaba hablando de que la situación se había vuelto muy difícil, muy confusa y que no sabemos cómo vamos a salir adelante. Pero aquel amigo insistió: no podemos perder la esperanza; si perdemos la esperanza, perdemos todo.

Creo que todos estos elementos y otros deben ser parte de la imagen que nos vamos haciendo de Jesús como seguidores. En Jesús tenemos que encontrar la inspiración para nuestra vida; seguir a Jesús, seguir su ejemplo y esto nos va a llevar a una vida a plenitud ,sin duda alguna.

Referencias